La profundización de su canal de acceso, zona de maniobras y pie de muelles más la posibilidad de conectar los mercados internacionales por un servicio regular feeder, potencian a este estratégico enclave fluvial

“Fue clave el dragado de 64 mil metros cúbicos de arena para la navegabilidad del canal de acceso en 2020 y otros 54 mil metros cúbicos previstos para este año, contratados a Jan de Nul, más allá del refulado con draga propia en zona de maniobras y pie de muelles”.

Esta frase, dicha por Carlos Arese, director del Ente Administrador del Puerto de Santa Fe, ante una comitiva de funcionarios y empresarias de Córdoba y Entre Ríos, marca el nuevo tiempo de esta terminal fluvial.

Con calado garantizado, el segundo paso fue conectar al puerto con los mercados internacionales y eso se logró con el remolcador Papu Viento y la barcaza Bagual, que ya llevan casi 10 viajes efectuados con destino a TecPlata y conexión con Santos (Brasil) y puertos de Asia. Próximamente, se espera que el servicio, hoy quincenal, alcance nuevos destinos en Europa, Estados Unidos y África.

La draga Álvar Núñez Cabeza de Vaca, de bandera argentina, en el puerto de Santa Fe

El "servicio feeder" ahorra hasta 40% de costos logísticos, pero necesita más volumen y nuevos destinos. En eso podría haber novedades según adelantó a El Litoral Diego Scuccimarra, encargado operativo de la terminal de contenedores.

Las delegaciones recorrieron el muelle de agrograneles -junto a los elevadores de granos- que se reactivaron en 2020 con el embarque de 20 mil toneladas y alcanzaron en 2021 100 mil toneladas. Este año ya se transfirieron a barcazas otras 20 mil toneladas de granos.

Junto a Arese, actuaron como anfitriones los ministros de la Producción, Daniel Costamagna y de Infraestructura, Silvina Frana.

"El puerto posible sucede", definió la ministra Frana al referir a la consigna del gobernador santafesino Omar Perotti para la estación fluvial local. La bajante del río impidió en 2021 que la terminal de combustibles (Raizen/Shell) operara 45 mil metros cúbicos mensuales; las barcazas que reemplazaron al buque que habitualmente hace el servicio, redujeron la operatoria a 25 mil metros cúbicos de combustibles que se redistribuyen en camión desde la capital santafesina al centro y norte del país.

"Sumar empresas y bajar costos", fue la clave que destacó el ministro Costamagna para dar sostenibilidad a la operatoria de barcazas. Dijo que el aporte empresario "nos va a ayudar a consolidar el proyecto", y que ese horizonte tiene "mucho que ver con las entidades". El ministro habló de "mayores frecuencias, inversiones logísticas y nuevos destinos", todas las cuestiones que hoy desafían las decisiones de los gerentes de logística de empresas exportadoras.